Con la espalda recta, las piernas paralelas y las manos apoyadas sobre los muslos, siéntate y coloca La Fuerza frente a ti, sobre la mesa o en un atril. Enciende una vela amarilla, el color del arcano; luego prende unos carbones en un incensario y quema en ellos un poco de olíbano o heliótropo, dos de sus perfumes asociados. ,,Cuando estés relajado fija tu atención en La Fuerza. Concéntrate e imagina que sus colores se hacen más intensos y nítidos, y las formas más definidas. Ahora visualiza cómo el arcano crece hasta acaparar todo tu campo visual. Mira la hierba que crece hasta la altura de la cintura de la mujer, el verde de sus hojas; contrástalo con el blanco inmaculado del lirio. Al fondo, los dos grandes árboles que enmarcan la escena parecen mecerse con el viento, y detrás de ellos las montañas toman un acerado color azul; mientras, el sol se pone por detrás de la cabeza de la mujer, dejando el cielo teñido de un pálido color rosado.
Ahora céntrate en la mujer de rasgos felinos y melena leonina, que sostiene un paño mágico con la efigie de un león; mira la diadema en forma de cobra que corona su cabello y fíjate en el destello que produce el sol sobre su cabeza. Déjate hipnotizar por ese fulgor; permite que tus ojos se vuelvan pesados y se cierren poco a poco, a la vez que percibes un cosquilleo en tu frente, que ya te es familiar de otros ejercicios de meditación.
Acto seguido, da un paso al frente y entra en el arcano. Siente el aire que mueve tus cabellos y percibe el roce de las plantas en tus piernas. Observa el paisaje desde dentro, y fíjate en el volcán del fondo, desde el que se eleva una tenue cortina de humo.
Identifícate con la mujer. Tú posees ahora su poder. Ordena al león que salga del lienzo y mira cómo salta y se coloca dócilmente a tu lado, esperando tus órdenes. Mándale que recorra contigo el paraje, y que busque entre las plantas animales desagradables o dañinos, como serpientes, escorpiones, ratas o arañas. Cuando encuentre alguno, dile que lo devore; ellos representan las intenciones oscuras de las personas que te afectan negativamente; al devorarlas, el león transmuta esa energía negativa en positiva, y la pone a tu disposición en forma de poder.
Por último, sal de la mujer y mírala fijamente a los ojos, mientras le pides que recorra para siempre, junto con el león, ese campo que representa tu personalidad, para que ambos supriman cuanto en ella aparezca de indeseable. Entonces será el momento de dar por terminada la meditación. Da un paso atrás y sal de la carta.
SIMBOLOGÍA BÁSICA
Función del arcano: Adquirir poder. Limpieza de vibraciones negativas.
Representa: La fuerza de la sugestión y la puesta en acción del subconsciente.
Despierta: El poder y la creatividad.
Desarrolla: La autoridad, la vitalidad y el optimismo
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