Siéntate en la posición del faraón; coloca la espalda recta, los brazos y las piernas sin cruzar, las manos sobre los muslos. Relájate; pon el arcano de La Justicia en un atril sobre la mesa, para que te resulte más fácil mirarlo. Enciende una vela verde, el color del arcano; luego, quema en un incensario unas gotas de esencia de violeta, el perfume que mejor vibra con él.
Dirige tu atención a la carta e inicia la visualización, centrando toda tu atención en el arcano. Imagina que éste se hace cada vez más y más grande hasta invadir todo tu campo visual; ve como todos los colores y las formas de la carta se intensifican: en la mitad oscura y nocturna, la Luna brilla iluminando las nubes, mientras que en la mitad diurna, el Sol resplandece, llenándolo todo de luz. Entre ambas está el rostro de una mujer, con la cabeza ceñida por una corona que se funde con la torre con cuatro aberturas que está justo detrás de ella.
Bajo la luz de su mirada, el símbolo del yin y el yang sirve de fondo a unas balanzas de oro que surgen de la rosa mística y en las que los elementos son equilibrados una y otra vez. Tu atención se centra en la luz que desprenden los ojos de la mujer, que se intensifica y te deslumbra, aturdiéndote, hasta que un cosquilleo en la frente te obliga a cerrar los ojos y a entrar en el arcano. Una vez dentro de él, tú te identificas con la figura de La Justicia, tu mente está iluminada por las cuatro aberturas de la torre y sientes el poder que emana del conocimiento de mantener el justo equilibrio entre los opuestos.
Acto seguido, imagínate en la sala donde se va a juzgar tu caso, con el juez, los abogados, el jurado, y visualiza que en el platillo izquierdo de la balanza se encuentra el sumario de tu caso, y que este platillo brilla extraordinariamente, tanto que todos se fijan en él. Siente ahora cómo el rayo de luz de tus ojos se vuelve de color verde y dirígelo al juez, los abogados y a todos los que estén en la sala, y nota cómo esa energía despierta el sentido de la justicia en todos los presentes, de modo que, si tú tienes la razón, el juicio se decantará a tu favor.
Esta meditación no es válida cuando se es culpable de aquello que se está juzgando, ya que tan sólo sirve para hacer justicia.
Una vez finalizada la meditación, deja de identificarte con La Justicia, da mentalmente un paso atrás y siente cómo vas saliendo del arcano.
SIMBOLOGÍA BÁSICA
Función del arcano: Ganar pleitos.
Representa: La ley universal del equilibrio de fuerzas antagónicas. El Karma.
Despierta: armonía interna y la proximidad.
Desarrolla: El sentido de la justicia, la armonía y la sociabilidad.
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