Significado
Una música celestial perfuma la brisa: tu alma ha hecho sonar su llamada.
Está intentando comunicarse contigo. Debes dejar todo lo que estás haciendo a fin de prestar atención y escuchar su voz con cuidado. Ha llegado la hora de que sea una prioridad para ti conectar con tu alma y vivir con ella. Eso requiere aquietar tus cuerpos emocional, físico y mental y entrar en el silencio.
¿Estás confundida respecto a tu propósito en la vida y sientes que estás vagando sin dirección? ¿Has sufrido la muerte de algún ser querido y sientes la pérdida de significado que esta separación supone? ¿Estás harta de la vida en nuestra sociedad materialista y consumista y buscas algo espiritualmente más gratificante? ¿Está, quizá, preparada para la sensación de paz y amor que conlleva el estar alineada con tu alma?
Cualquiera sea el punto en que te halles en este momento, alinearte con tu alma constituirá la mejor contribución para hacer que tu vida sea como el cielo en la tierra; ¡así debería ser!
Meditación
Encuentra un momento y un lugar en el que no te molesten, cierra los ojos.
Inspira lenta y profundamente y, al exhalar, mira o siente tu tensión como una estrecha armadura que cubre tu cuerpo.
Inspira otra vez lenta y profundamente hacia la armadura y, a medida que exhalas, mira o siente que esta comienza a adelgazarse y a disolverse poco a poco.
Haz una última respiración dentro de la armadura y, al soltar el aire, mira o siente cómo desaparece por completo. Ahora estás totalmente relajada.
Deja que tu respiración se normalice.
Mira o siente una granja.
Haz una inspiración profunda y, a medida que sueltas el aire, lo diriges hacia la granja con el fin de que la imagen se vuelva más fuerte.
Haz otra inhalación profunda y, al exhalar, dirige el aire hacia la granja, evocando todos los olores, para que todo sea más intenso.
Haz una última inspiración profunda y, al soltar el aire, dirígelo a la granja para que la percibas más fuerte todavía. Ahora, manteniendo la imagen de la granja, intenta penetrar en ella.
Puedes oler la tierra, es primavera y han comenzado a arar.
Das una vuelta por el lugar y ves a una joven campesina con las faldas recogidas a fin de tener mayor libertad de movimiento.
Ella te ve y se acerca a saludarte.
Te dice que se llama Juana (Juana de Arco) y te pide que la sigas, pues te ha estado esperando.
Juana te lleva por la granja hasta un estrecho camino que conduce al bosque.
Camina apresurada y decididamente y, tras recorrer en silencio el trayecto con ella, rodeadas de la belleza del antiguo bosque, se detiene ante un manantial sagrado.
Te hace señas para que te sientes sobre una roca grande, y así lo haces.
Juana se arrodilla frente al manantial y saca de su bolsillo un huevo como ofrenda, colocándolo al lado del manantial.
Tras permanecer en silencio durante un momento, sumerge la mano en el agua y se bendice a sí misma.
Regresa hacia donde te encuentras y te dice que sus Voces le han pedido que te ayude en la búsqueda de tu alma. Una forma de hacer esto es contarte un poco de su historia. Te cuenta que mientras hacía los trabajos repetitivos de la granja comenzó a oír sus Voces. Su cuerpo físico sabía qué hacer y se concentraba en realizar las tareas, esto hacía posible que su mente superior se liberase.
Al comienzo la conexión era débil, pero tras propiciarla aprendiendo a aquietar el parloteo mental ganó en fortaleza. Otra cosa que le ayudó fue bañarse en este manantial sagrado. Juana te invita a meterte en el manantial sagrado.
Aceptas y te preparas.
Antes de entrar, te bendice con el agua y te pide que declares tu intención de tener una relación estrecha con tu alma.
Haces la declaración con tus propias palabras y después penetras en el manantial. El agua está perfecta. Sientes que todo está cargado de energía vibrante. Juana sugiere que te sumerjas totalmente, manteniendo la respiración bajo el agua tanto tiempo como te sea posible, y que salgas después.
Haces una inspiración profunda y te sumerges.
Mientras contienes la respiración y cuentas hasta diez, sientes un sentimiento expandido de ser; de perspectiva.
Te sientes llena de luz y amor. A medida que nadas hacia la superficie y respiras, percibes una conexión hacia tu alma.
Sales del manantial y te sientas al lado de Juana.
Toma tus manos sin decir palabra y ambas entráis en el silencio y en contacto con vuestra alma.
Puedes sentir la energía de Juana mientras te ayuda a mantener un contacto más fuerte.
Preguntas a tu alma qué es necesario para fortalecer una relación con ella, y ella te lo dice.
Juana oprime tus manos y ambas os miráis. Te advierte que es hora de regresar.
La sigues hasta salir del bosque y llegar hasta la granja. Juana te da un abrazo y te dice que puedes volver a visitarla en cualquier momento.
Después se dirige hacia el granero. Inhala sintiendo los dedos de tus pies y mantén un momento la respiración.
Al exhalar, mueve los dedos de los pies.
Ahora inhala sintiendo los dedos de tus manos y mantén un momento la respiración.
Al exhalar, mueve los dedos. Inhala sintiendo todo tu cuerpo y, al exhalar, si estás preparada, abre los ojos. ¡Bienvenida a tu ser!