Siéntate frente a El Ermitaño, con la espalda recta y las manos sobre los muslos. Coloca el arcano sobre un atril, para que aparezca derecho ante tus ojos. Enciende una vela de color azulado, el color del arcano, y, en un incensario, prende un carbón en el que quemarás unas gotas de esencia de narciso.

Una vez que estés totalmente relajado, dirige tu atención hacia el arcano y permite que su diseño te atrape. Imagina cómo la carta crece ante tus ojos, y los colores y las formas adquieren mayor definición: la flor que desprende luz a los pies de El Ermitaño, la rama florida de detrás del personaje, que aparece sujeta a la Luna. Siente el frescor y la paz de la noche y concéntrate en el resplandor de la estrella que ilumina el cielo nocturno, y de su gemela, que surge de la cima de la montaña.

Centra ahora tu atención en el hombre que medita. La cinta que cuelga desde su frente sobre los brazos lleva bordado el signo de Virgo y otros signos planetarios. Siente la paz que transmite su rostro.

Fíjate en la lámpara que está a sus pies y en el mágico resplandor que desprende; su fulgor atrae por completo tu atención y te obliga a parpadear. Siente el peculiar cosquilleo en tu entrecejo, que te obliga a cerrar los ojos. Da un paso al frente y contempla al maestro cara a cara. Te has introducido en el mundo del arcano. Ahora puedes sentir el frescor de la noche en tu piel, y percibirás el latido del pequeño pájaro que permanece inmóvil ante el hombre. El resplandor de la lámpara te deja ver un claro entre las flores, frente al hombre que medita; adopta la posición del loto y espera. De pronto, el hombre abre sus enormes ojos y te mira como si penetrase hasta tu alma; pero tú no te sientes incómodo.

Al mirarle, le reconoces como a un viejo amigo. Es tu maestro, el que te ha estado guiando siempre hacia las ‘respuestas que tu alma buscaba, bajo la forma de libros, o encuentros, en apariencia fortuitos, con personas que han dado un poco de luz a tu vida. Ahora puedes preguntarle qué vía de desarrollo es la más adecuada para ti en este momento, o pedirle protección para evitar los peligros del camino. Incluso puedes solicitarle que se manifieste en tu vida físicamente, en la forma de un maestro de carne y hueso.

Cuando des por terminada la meditación, da mentalmente un paso hacia atrás y sal del arcano.

SIMBOLOGÍA BÁSICA

Función del arcano: Recibir la luz.

Representa: La sabiduría que conlleva trascender los opuestos; el tacto.

Despierta: perfección y la realización.

Desarrolla: La capacidad de análisis y el espíritu observador y crítico.

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