Papel impreso.107 x 85 cm. Colección particular
Este mapa utiliza una proyección axonométrica, una técnica desarrollada en el siglo XV para mostrar detalles tridimensionales manteniendo la escala. Difiere de la perspectiva con un solo punto de fuga, en la que el primer plano es más grande que el fondo.
Hermann Bollman quería un mapa que mostrara todas las calles y edificios en igualdad. Formado como artista gráfico y leñador, dibujó el mapa a mano, a partir de 50.000 fotografías terrestres y 17 000 aéreas.
El mapa, detalladísimo, exagera la anchura de las calles para crear la cantidad justa de espacio en blanco, el lugar en el que se asientan los edificios.
Representa la densidad urbana y otorga nitidez a cada edificio. La exageración vertical crea la sensación de que los rascacielos crecen. La numeración de las calles, coherente, usa letras bellamente espaciadas. Los detalles invitan a investigar, y los colores, con predominio de tonos pastel que identifican la función de los edificios de tejados grises, imitan el horizonte gris de Manhattan.
Se incluyen características menos visibles, ventanas, árboles y detalles arquitectónicos que demuestran que la omisión no es la única posibilidad cartográfica. Bollmann da pruebas de que los detalles también pueden dar claridad y un sentido del lugar.