
Arca de las Reliquias de Oviedo.
Varios documentos fechados entre los siglos XI y XIII hacen referencia al viaje o viajes que habría realizado el Arca de las Reliquias. El más antiguo es un diploma, una especie de acta notarial, del año 1075, donde se recoge la primera apertura oficial del Arca en presencia y por mandato del rey Alfonso VI de León.
En este texto se cuenta cómo en un Toledo amenazado por los invasores musulmanes, se habrían recogido varias reliquias de la zona en una gran caja de madera que, para escapar de la destrucción, habría sido trasladada al norte por cristianos que huían de la corte.